De la redacción de canchallena.com.- La ilusión viva y la alegría de Independiente al término del partido contrastó con la decepción de San Lorenzo. En un partido decisivo para mantener las aspiraciones en el Apertura, el equipo de Gallego goleó 3 a 0 al Ciclón, en el Nuevo Gasómetro, con goles de Darío Gandín, Martín Gómez y Leonel Núñez.
La expulsión de Alejandro Gómez, en los minutos finales, fue una muestra de la impotencia que reinó en el conjunto de Simeone, que en una semana vio diluirse sus sueños en la Copa Sudamericana y en el campeonato.
Desde el comienzo del primer tiempo, Independiente pareció encontrar la fórmula para atacar a San Lorenzo donde más le dolía. Con los desbordes por las bandas de Mareque, Busse y Piatti, el equipo de Gallego llenó de centros el área del Ciclón.
A los 3 minutos, un cabezazo de Silvera pasó cerca del arco de Migliore; a los 6, el cabezazo que pasó por al lado del palo fue de Gandín; a los 12, el protagonista fue Mancuello, pero el palo le negó el gol.
Tuvieron que pasar 36 minutos para que los Rojos consiguieran abrir el marcador, de la mano de Gandín, que transformó en gol un preciso centro de Mancuello.
Por el lado del Ciclón, la única chance de peligro fue a los 19 minutos, pero Gabbarini evitó que Reynoso pusiera en ventaja a San Lorenzo.
En el complemento, San Lorenzo intentó cambiar la actitud e inquietó el arco de Gabbarini pero Alejandro Gómez, a los 7, y Civelli, a los 11, no pudieron empatar el partido.
Pero sólo 29 minutos le duró la esperanza al Ciclón ya que, a los 30, Martín Gómez aumentó la ventaja de los Rojos y, a los 33, Núñez terminó por definir un partido que Independiente supo dominar desde el principio.
La expulsión de Alejandro Gómez, a los 35, fue una mancha más que se agregó a la constante indiciplina de los jugadores de San Lorenzo.
Con el 3-0 final, San Lorenzo culminó una de sus peores semanas del año. La eliminación de la Copa Sudamericana por River, de Uruguyay, la derrota que sufrió ante Banfield y la caída de hoy hicieron que se diluyan las aspiraciones del Ciclón por conseguir un título en el 2009.
En tanto que Independiente, a seis puntos de los líderes, mantuvo vivos sus sueños y sabe que, el sábado próximo, tendrá un partido decisivo por la lucha del campeonato ante Banfield.
La expulsión de Alejandro Gómez, en los minutos finales, fue una muestra de la impotencia que reinó en el conjunto de Simeone, que en una semana vio diluirse sus sueños en la Copa Sudamericana y en el campeonato.
Desde el comienzo del primer tiempo, Independiente pareció encontrar la fórmula para atacar a San Lorenzo donde más le dolía. Con los desbordes por las bandas de Mareque, Busse y Piatti, el equipo de Gallego llenó de centros el área del Ciclón.
A los 3 minutos, un cabezazo de Silvera pasó cerca del arco de Migliore; a los 6, el cabezazo que pasó por al lado del palo fue de Gandín; a los 12, el protagonista fue Mancuello, pero el palo le negó el gol.
Tuvieron que pasar 36 minutos para que los Rojos consiguieran abrir el marcador, de la mano de Gandín, que transformó en gol un preciso centro de Mancuello.
Por el lado del Ciclón, la única chance de peligro fue a los 19 minutos, pero Gabbarini evitó que Reynoso pusiera en ventaja a San Lorenzo.
En el complemento, San Lorenzo intentó cambiar la actitud e inquietó el arco de Gabbarini pero Alejandro Gómez, a los 7, y Civelli, a los 11, no pudieron empatar el partido.
Pero sólo 29 minutos le duró la esperanza al Ciclón ya que, a los 30, Martín Gómez aumentó la ventaja de los Rojos y, a los 33, Núñez terminó por definir un partido que Independiente supo dominar desde el principio.
La expulsión de Alejandro Gómez, a los 35, fue una mancha más que se agregó a la constante indiciplina de los jugadores de San Lorenzo.
Con el 3-0 final, San Lorenzo culminó una de sus peores semanas del año. La eliminación de la Copa Sudamericana por River, de Uruguyay, la derrota que sufrió ante Banfield y la caída de hoy hicieron que se diluyan las aspiraciones del Ciclón por conseguir un título en el 2009.
En tanto que Independiente, a seis puntos de los líderes, mantuvo vivos sus sueños y sabe que, el sábado próximo, tendrá un partido decisivo por la lucha del campeonato ante Banfield.
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